Descripción
Poner la rodilla en tierra como acto de respeto y adoración ante la grandeza de nuestro Ser interior. En humildad y sentido de pureza en la oración nos vinculamos con lo Superior, lo Esencial, lo Infinito.
Poner la rodilla en tierra como acto de respeto y adoración ante la grandeza de nuestro Ser interior. En humildad y sentido de pureza en la oración nos vinculamos con lo Superior, lo Esencial, lo Infinito.