Descripción
Esta obra reúne a dos grandes genios del esoterismo, quienes autorizados por su conciencia objetiva exponen esta bella escena natural titulada LOS ELEMENTALES DE LA NATURALEZA. Todo el universo es una expresión de conciencia, y por lo mismo hay en el mundo innumerables estos de voluntad consciente e inteligente, algunos con forma visible, otros invisible, algunos sin forma, como corrientes de aire; otros indefinidos, como la niebla o las nubes. Algunos sólidos, como las rocas, unos impermanentes; otros permanentes, como las estrellas. La existencia de estas criaturas elementales contradice la teoría de la ciencia moderna de que entre cuerpo y cuerpo en el espacio sólo existe el vacío; el esoterista consciente de la verdad sabe que este espacio está poblado por millones de criaturas elementales, ya sean del aire, del fuego, del agua o de la tierra o de otros elementos desconocidos para el hombre moderno.